miércoles, 1 de junio de 2011

Irlanda, días diez y once

Nuevamente me veo obligado a apelmazar días. Ayer estuve en un pueblo que está a 165 km de Dublin, Athenry, en el cual no tenían wifi en el hostel (por cierto, el más cómodo en el que estuve hasta ahora), así que otra vez se van a encontrar con dos subtítulos en el texto. Pónganle onda, son las 23, y estuve viajando desde las 10.


Los campos de Athenry


Cuando la gente me preguntaba "¿y por dónde vas a ir?", no entendían por qué la decisión de parar en un pueblo absolutamente ignoto. Eso pasa porque no escuchan punk rock. Conocí la existencia de este pueblo por una versión que hace DKM de una canción folk irlandesa, escrita en 1970. La canción narra la historia de un hombre que cae preso y es mandado a Australia, durante la época de La Gran Hambruna. La historia no sería gran cosa si no fuese porque la canción es el diálogo que tienen el tipo este (Michael) con su esposa (Mary); y básicamente trata sobre las tragedias irlandesas, que no tienen absolutamente nada que envidiarles a las griegas. Un hombre, con mujer e hijos sufriendo hambre, decide robarle trigo al Lord, pero es apresado. Como era la costumbre, a los presos se los mandaba derechito a Australia, por lo que la pobre Mary quedó sola con los críos. Michael le dice pide que los críe con los mismos valores que lo llevaron a hacer lo que hizo. Agreguen una gaita a eso y traten de evitar el sollozo (estoy haciendo un horroroso resumen, para más detalles hagan click acá). La canción, años más tarde, se convirtió en el himno de varios equipos (de distintos deportes) irlandeses. Cuando vi que la distancia entre Dublin y Athenry eran unos míseros 165 km, no lo dudé. 


Es un pueblo, ni más ni menos que eso. No tiene nada, dos o tres estaciones de servicio, un Supermac´s (onda Burger King) y como 15 pubs (creo que van 4 personas a cada uno). Tiene, eso si, un hermoso castillo  que construyeron en el año 1200 apoximadamente. En una época estuvo en ruinas, y pero lo pusieron pipícucú para que lo boluditos a los que le gustan los libros de Tolkien y las baladas folks irlandesas, vayan a pagar tres euros para verlo. Como soy uno de esos boluditos, me encantó.


Cervezas del día: Guinness y Beamish. Algunas fotos (no cierren, ¡que después de las fotos viene la segunda parte!):

Castillo de Athenry

Acá guardaba el trigo el puto de Trevelyn

Vista al cementerio desde lo alto del castillo.

Cementerio con lápidas MUY viejas

Parcela que me voy a comprar para mi vejez.

Castillo, versión creepy. Eran las 23, aunque no lo crean.
Belfast Rock City


Después de irme al hostel corriendo, porque sacando la última foto me dieron un poco de escalofríos, dormí. Nobleza obliga, tengo que hacerle publicidad a Iggys, para cuando alguno de ustedes quiera ir. Lo maneja una familia, el hostel, un bar y una tienda de vinos y cervezas. Creo que son 4 en total los que hacen todo. Las camas son muy cómodas (más cómodas que la mía, la puta madre), y el lugar es muy cálido. Como son tan pocos, lo único que te ofrecen de desayuno es un bowl de cereales y café, pero los banco a muerte. Buena gente. Además, le tipo me dijo "vos debés ser Sebastián" cuando entré. Un grosso.


Me desperté a las 9 y fui a la estación de tren, tenía que ir a Belfast. Me perdí uno por media hora, pero como pasan cada dos horas, no tuve problema. 150 minutos después estaba otra vez en Dublin (decirlo en minutos no ayuda... fue un viaje largo).


Un párrafo aparte (justo como este) se merecen los trenes irlandeses. Súper puntuales, pero no se si decirles que son "rápidos" (165 km, en dos horas y media, me da un promedio de 66 km/h... no se si es rápido eso, no me parece). El ying y el yang, tienen enchufes, pero no tienen wifi. Pensé que los trenes primer mundistas tenían wifi de por lo menos 512... como sea, es un "white people problem" (amigos fanáticos de CK Lewis, ¡¡ustedes me entienden!!). Lo bueno, el paisaje. Lo malo, no hay mucho lugar para poner el equipaje.


Otra vez en Dublin, me fui corriendo desde la estación Heuston (donde llegué de Athenry) hasta la otra estación de tren (los trenes a Belfast salen de la estación Connolly), que estaba más o menos lejos. Fueron 90 minutos de caminar rápido con la valija (chau rueditas, por cierto), sólo para darme cuenta que la estación a la que fui era Pearse. Eran las 14, no había comido, y estaba transpirando como un violador... pero me había decido a no desesperar. Le pregunté al Señor Vendedor de Tickets, y me dijo que podía comprar el pasaje hasta Belfast ahí mismo, que sólo tenía que hacer una combinación. O sea, era Pearse-Connolly-Belfast. ¿Y era lejos Pearse de Connolly? Nah, dos paradas. 


Creo que esto es lo mejor que les puedo decir de todo esto, si hacen alguna vez la locura esta, y les pasa algo como esto, no desesperen, pregunten, que los servicios acá son civilizados, y si vas con buena onda, te responden bien. Si vas como cuando vas a reclamar el boleto del subte, seguramente vayas preso. Por todos lados tienen carteles de "no se la agarre con nuestro personal". Eso si, hay cosas que no tienen solución. Por ejemplo, cuando compré el boleto a Athenry, lo compré dos días antes, pero hubo una confusión en el medio, y el tipo me dio un boleto que no me servía el 31, me servía el 1. En Informes me dijeron que la única solución era llenar una planilla de reembolso, que era en efectivo, tres semanas después. Moraleja, terminé tirando 40 euros a la basura. Mientras revisen y sean amables, va a ir todo bien.


Finalmente llegué a Connolly, y el tren a Belfast salía 20 minutos después. Belfast está a 170 más o menos, y el tren tardó poco más de dos horas, un poco más rápido que el otro. Después de ahí, un viaje corto al centro, una transpirada más porque no encontraba donde cambiar plata (en Irlanda tienen euros, en Irlanda del Norte tienen libras esterlinas), y después una pequeña caminata al hostel. Este está más o menos... como siempre, me tocó el cuarto que está arriba de todo, y por alguna razón no tienen la llave (es casi la una de la mañana, estoy esperando a ver si tienen una solución a eso).


Cuando llegué, salí a pasear un poco, a ver los alrededores, y a comer algo, que no había comido casi nada en todo el día. Cerveza del día: Harp. Whiskey del día: Bushmills (150 mil porrosos).


Algunas (las últimas) fotos del día:

Paisaje de ventanilla

Merienda irlandesa...

Paisaje dos... imaginen 9 horas de eso.

Belfast City Hall. No, no se arma bolichongo ahí.

¡Rock!
¡¡Shazbut, nanu nanu!!

2 comentarios:

  1. ¡Como te banco chabón!

    ¿Ya te decidiste en dónde te quedás a vivr o esperás al final del viaje?
    ¡¡¡Yo si voy a un solo lugar de esos no vuelvo!!! ¡Largo todo a la mierda y trabajo por comida! (?)

    Saludos

    sven23

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  2. Parcelaaaaa! Locuuu! Just beautiful.. Happy happy joy joy mientras me pudro en la monotonia de los diaaas... besoote Gru!

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